Un historial crediticio dañado ocurre cuando hay una deuda vencida en un préstamo o préstamo, por la cual el prestamista acudió a los tribunales para reembolsarla. Los bancos, por regla general, son bastante escépticos con respecto a estos posibles prestatarios y se niegan a concederles un préstamo. Para obtener un préstamo, primero debe corregir su historial crediticio.
Instrucciones
Paso 1
Determine la razón por la que se dañó su historial crediticio. Se puede acceder a esta información a través de los burós de crédito. Cabe señalar que las personas tienen derecho a obtener acceso gratuito a la información sobre sí mismas y realizar algunos ajustes.
Paso 2
Analice los datos enviados y escriba una solicitud de corrección si encuentra alguna inexactitud. También puede escribir comentarios en los que explique el motivo de la situación. No ayudará a corregir su historial crediticio, pero es posible que lo traten con comprensión.
Paso 3
Demuestre al prestamista que su posición financiera es estable actualmente y que puede cumplir con sus obligaciones crediticias. Para hacer esto, es necesario pagar no solo préstamos, sino también impuestos, facturas de servicios públicos y otros requisitos financieros durante al menos un año. Tenga en cuenta este hecho al solicitar un préstamo.
Paso 4
Ponga su dinero en un depósito a corto plazo. La presencia de este tipo de ingresos puede ser compensada por la entidad de crédito como un plus y repercutir positivamente en la decisión de concederle un préstamo.
Paso 5
Obtenga algunos préstamos pequeños de otros bancos si planea tomar un préstamo grande. Como regla general, estos préstamos al consumo por pequeñas cantidades se otorgan sin un certificado de ingresos y no dependen de los historiales crediticios, por lo que es bastante fácil obtenerlos. Si reembolsa estos préstamos dentro de unos meses, aparecerán registros positivos en su historial crediticio, lo que le permitirá recibir una cantidad más sustancial.
Paso 6
No indique información falsa en su solicitud de préstamo. Recuerde que casi todos los datos sobre usted son fáciles de verificar, por lo tanto, mintiendo o reteniendo información, solo agravará su situación y empeorará su historial crediticio.