El desarrollo de la producción determina en gran medida la situación económica general del país. En la mayoría de los países, incluida Rusia, las diferentes industrias se desarrollan de manera desigual. No obstante, la moderna estructura de producción postindustrial de la Federación de Rusia es capaz de satisfacer una amplia gama de necesidades actuales o futuras de la población.
La estructura económica de Rusia incluye dos tipos de producción interconectados y mutuamente complementarios. La producción material crea valores tangibles, mientras que la producción intangible incluye obras de ciencia, arte y cultura espiritual.
El sector manufacturero también incluye el sector de servicios, que tiene singularidad y un gran potencial de crecimiento. La diferencia entre servicios y otro tipo de actividad es que su resultado útil se manifiesta durante el trabajo y ciertamente está asociado a la satisfacción de una determinada necesidad. Un ejemplo serían los servicios de transporte o el trabajo de un médico. Distinga entre servicios materiales, como comercio, vivienda y servicios al consumidor, e intangibles: atención médica, educación, servicios sociales, arte, etc.
Un lugar especial en la estructura de la producción rusa está ocupado por varios tipos de infraestructura que brindan condiciones generales de vida. Esto incluye la construcción de carreteras, servicios públicos e instalaciones de energía. La infraestructura juega un papel integrador en la economía, interconectando varias industrias e impartiendo integridad a la actividad económica.
En la actualidad, Rusia se distingue por el desarrollo predominante del sector de servicios, que representa alrededor del 49% del producto interno bruto. Los tipos de servicios más desarrollados incluyen comercio, transporte, comunicaciones, restaurantes y hoteles, actividades financieras, transacciones inmobiliarias, educación y atención médica.
La participación de la industria manufacturera rusa es solo alrededor del 16% del PIB. Las más notables aquí son industrias tales como la industria alimentaria, procesamiento de madera, producción de pulpa y papel, industria química, metalurgia, maquinaria y equipo. La minería representa alrededor del 9% del PIB.
De todos los sectores industriales del país, las posiciones más fuertes se encuentran en la producción de equipos eléctricos, producción química, actividades editoriales y de impresión. La extracción de combustibles y minerales energéticos y las actividades de tala se destacan: en términos de las reservas de estos recursos, Rusia ocupa posiciones altas en el ranking mundial.
Una de las tareas para el mayor desarrollo del sector manufacturero es eliminar el desequilibrio entre sectores individuales y acelerar el desarrollo de las industrias de procesamiento. Las tasas de crecimiento estables y altas de la economía rusa son imposibles sin una reestructuración estructural de toda la economía nacional, que refleje los cambios en la demanda del mercado.