En la macroeconomía moderna, una situación que combina un estado depresivo de la economía, una recesión económica y el aumento de precios se conoce como estanflación. Este término se formó a partir de una combinación de dos conceptos económicos "inflación" y "estancamiento". La estanflación es un fenómeno relativamente nuevo que ha surgido como resultado de la aparición de nuevas condiciones para la formación de capital.
El término "estanflación" se remonta a 1965 en Gran Bretaña, cuando se registraron los primeros procesos de estanflación en los años sesenta y setenta. Antes de esto, una economía en desarrollo cíclico se caracterizaba por el hecho de que en caso de una disminución de la producción y una depresión económica, los precios caían, es decir, deflación, o se inhibió su crecimiento. Aproximadamente a partir de finales de la década del 60 del siglo pasado, comenzó a surgir el cuadro contrario, que en la economía comenzó a denominarse estanflación. Fue especialmente pronunciado en los Estados Unidos, cuando, con una disminución de la producción, la tasa de crecimiento inflacionario de los precios fue del 10%. El movimiento de la economía en el marco de la ciclicidad se da entre el estancamiento, que se caracteriza por la caída de precios, alto desempleo, bajo nivel de crecimiento y actividad económica e inflación, acompañada de procesos opuestos. Así, para designar procesos caracterizados por alto desempleo y aumento de precios en ausencia de crecimiento económico, se decidió combinar los dos conceptos de "estancamiento" e "inflación" en uno: estanflación. El surgimiento de la estanflación, según una serie de expertos, se produce como consecuencia de la política de monopolios, que mantienen un alto nivel de precios durante la crisis. Además, este proceso está influenciado por las medidas anticrisis tomadas por el estado para gestionar la demanda y regular los aumentos de precios. Sin embargo, ni siquiera estas razones pueden explicar el surgimiento del fenómeno de la estanflación en el período comprendido entre finales de los sesenta y principios de los ochenta, que fue de carácter global y se manifestó en la mayoría de los países occidentales desarrollados. Presuntamente, este proceso se inició debido a la globalización en la esfera económica, caracterizada por la abolición del proteccionismo y la liberalización del comercio exterior. Esto condujo al fin de la existencia de economías nacionales aisladas en los países occidentales y dio forma a la economía mundial global. Quizás la globalización ha provocado un aumento simultáneo de la inflación y el desempleo en todo el lugar. Las crisis energéticas también se atribuyen a las causas de la estanflación.
