El árbol de problemas es un programa clave diseñado para facilitar el proceso de formación de tareas en la empresa y la búsqueda de soluciones. Le permite determinar toda la gama de causas y consecuencias interrelacionadas del problema, excluyendo casi por completo la influencia de factores subjetivos externos. El árbol de problemas es una de las herramientas clave en el análisis de sistemas. Consideremos la construcción de este modelo usando un ejemplo de horario inconveniente en una universidad.
Instrucciones
Paso 1
Formule el problema. Debe existir en el presente, no en el pasado ni en el futuro. Sea específico y evite palabras innecesarias. Trate de no tocar los problemas globales, sobre los que es casi imposible influir ("calentamiento global", "falta de espiritualidad de la sociedad", etc.).
Paso 2
Enumere las partes interesadas. Es decir, es necesario identificar a todos los participantes que se ven afectados directa o indirectamente por este problema. Para hacer esto, debe responder las siguientes preguntas. ¿Quiénes se ven más afectados por este problema? ¿Quién participará directamente en la solución del problema? ¿Qué organizaciones o grupos de personas pueden influir en el curso del trabajo? Establezca exactamente cómo una parte interesada en particular depende del problema.
Paso 3
Empiece a construir un árbol de problemas. Consta de tres partes: raíces, tronco y corona. Las raíces son las razones del problema. Son ellos quienes determinan su existencia. Si los soluciona, el problema desaparece. El maletero es la redacción. Crohn son las consecuencias que conllevó el problema. Dibuja el tronco primero.
Paso 4
A continuación, debes dibujar las raíces. Primero, escriba todas las razones que surjan durante la sesión de lluvia de ideas. Luego agrúpelos e indique las relaciones. Trate de encontrar el máximo número de "raíces", ya que es su decisión la que tendrá un impacto decisivo.
Paso 5
El último elemento es la corona. Identificar los puntos de contacto inmediatos entre el problema y las consecuencias. Luego, rastrea qué otro impacto negativo se puede generar, es decir, baja al nivel inferior. Continúe haciendo esto siempre que las consecuencias sigan dentro del alcance del problema.