La principal razón por la que los empleados abandonan una empresa es la mala gestión. Y la mayoría de los que alguna vez se encuentran en tales condiciones pueden estar de acuerdo con esta afirmación. Mucho depende realmente del comportamiento del gerente.
Según la experiencia de muchos subordinados, hay siete comportamientos clave que generan un fuerte deseo entre los empleados de dejar sus trabajos:
1. No cumpla sus promesas
Si un gerente no cumple sus promesas, ¿cómo puede esperar que alguien a su alrededor cumpla sus promesas? Este comportamiento puede crear una cultura que permita la falta de responsabilidad dentro del equipo. Y la falta de responsabilidad conducirá a una disminución de la productividad del equipo. También disminuirá la credibilidad de otros empleados.
2. Ignorar a los trabajadores ineficaces
Los artistas descuidados en un equipo pueden desmotivar a los buenos y grandes artistas. Influirán en el desempeño de los demás en el equipo, así como en el éxito general del equipo. Cuanto más tiempo espera un gerente para resolver este problema de bajo rendimiento, mayor es el riesgo de perder a los mejores.
3. La presencia de reuniones irregulares
Cuando los gerentes eligen no tener reuniones de equipo regulares, envían una señal de que la comunicación entre los miembros del equipo no es importante. Y cuando un equipo no comparte información de manera regular, es probable que sus miembros no estén incluidos en las decisiones clave, los informes de progreso y la capacitación entre ellos.
4. Rechazar las opiniones e ideas de los demás.
A nadie le gusta que el "saber hacer lo es todo", y cuando un gerente descarta las ideas de los demás, se envía un mensaje de que es más inteligente que los demás en el equipo. Con el tiempo, las personas dejarán de compartir sus ideas e innovaciones, estará cerrado., el gerente perderá su competitividad.
5. Microcontrol
El gerente cree que solo hay una manera de realizar una tarea y que debe tomar todas las decisiones solo. Es probable que la gente recurra a su jefe para informarle. En última instancia, dicho gerente demostrará a los demás que desconfía de otros juicios. Muchos comenzarán a confiar en el gerente para todas las decisiones, y lo siguiente es que el gerente hará todo el trabajo por su equipo.
6. Exhibición de arrogancia
El mero hecho de que una persona sea gerente no la convierte en rey (o reina). ¿El gerente puede simplemente negociar con su subordinado? ¿O, a diferencia de él, los empleados son siempre "los que cometen errores"? La arrogancia puede manifestarse en la forma de llegar tarde a las reuniones y perder el tiempo con otras personas. Efecto de fondo: la arrogancia muestra falta de respeto por otras personas.
7. No delegar de forma eficaz
Como gerente, el trabajo de un líder es principalmente hacer el trabajo a través del esfuerzo de otras personas, lo que significa que debe ser delegado. Muchos gerentes novatos se enfrentan al problema de esta responsabilidad, ya sea a través de la planificación o en tiempo real.
Algunos gerentes realmente ven lo arriesgado que es delegar. Y la desgana del delegado suele estar impulsada por el miedo: miedo, pierde el control, pierde su reputación de "experto", o tiene que enfrentarse a lo desconocido. Recuerde que la delegación es mucho más que tarea o solución; requiere una comprensión de a quién delegar; cuánta información se necesita compartir; y con qué frecuencia monitorear el progreso y el estado de una persona.
Los consejos son bastante sencillos. Debe hacer un plan sobre cómo puede cambiar su comportamiento como gerente para evitar el riesgo de perder a los mejores.