La promoción de productos es impensable hoy sin publicidad. Con toda la abundancia de formas y métodos de presentar información publicitaria, la publicidad impresa sigue siendo una de las más populares y efectivas. Su núcleo es el texto. ¿Cómo redactar correctamente un texto publicitario fácil de leer, memorable y, lo que es más importante, eficaz?
Instrucciones
Paso 1
Un buen texto publicitario, incluso intrigante con cierta reticencia y la promesa de sorpresas, siempre tiene un significado claro y explica claramente la esencia de su producto o servicio.
Paso 2
Cualquier promoción sensata debe tener un lema que transmita sin ambigüedades la esencia de su oferta y sus beneficios para el consumidor. Intente incluir el eslogan original en el texto de su anuncio.
Paso 3
El lenguaje del mensaje publicitario, las palabras y los términos que utilice deben ser apropiados tanto para el producto que se anuncia como para el público objetivo al que se dirige. No utilice frases trilladas y tópicos que puedan utilizarse a la hora de publicitar cualquier producto ("nuestros precios le sorprenderán gratamente", "calidad contrastada", etc.). Elimina del texto palabras ficticias que no sean necesarias en absoluto.
Paso 4
La cantidad óptima de texto publicitario es una gran ventaja. Es poco probable que el texto extenso se lea hasta el final. No considere que el primer borrador de su ensayo sea definitivo. Déjelo "reposar" un rato, y con una nueva mirada pronto descubrirá todas las deficiencias del texto.
Paso 5
Recuerde: su potencial comprador, es decir, el lector del anuncio, debe estar "enganchado" a la consistencia y coherencia de la presentación de sus propuestas publicitarias. Divida claramente el texto en bloques cortos de varias oraciones, resaltándolos con color, fotografías, dibujos si es necesario. Preséntese siempre como comprador. ¿Cómo toma su decisión de compra? ¿Qué pasos debe seguir para fortalecer su deseo de comprar un producto?
Paso 6
En el texto del mensaje publicitario, es imposible mezclar inadecuadamente el principal y el secundario. Si es un detalle, entonces necesariamente un "punto culminante". De lo contrario, la atención del consumidor se desviará involuntariamente de los principales argumentos a favor del producto o servicio y no obligará al producto a ser evaluado positivamente.
Paso 7
Intente escribir el texto en un lenguaje sencillo, comprensible, pero vivo e interesante. Pero no seas inteligente, es repulsivo. La emocionalidad también debe ser moderada.
Paso 8
Al redactar un texto publicitario, presente la esencia de la propuesta sin adornos y la más mínima mentira. Si engaña al consumidor una vez, lo perderá para siempre.