En nuestro país, hay mascotas en casi todas las familias, y son consideradas sus miembros de pleno derecho. Por lo tanto, mucha gente piensa que las clínicas veterinarias deberían ganar mucho dinero. Sin embargo, este negocio no es muy rentable: el costo de los servicios es aproximadamente el 75% del precio. En este sentido, hay pocas personas que quieran abrir una clínica veterinaria: la inversión vale la pena durante mucho tiempo, durante varios años.
Instrucciones
Paso 1
Sin embargo, si decide participar en una causa tan noble como el trato a los animales, prepárese para algunas dificultades. En primer lugar, seleccione una habitación. Debe cumplir con los requisitos del SES. El principal es que la clínica debe estar ubicada a no menos de 50 metros de los edificios residenciales, y si planea abrir un hospital, a 150 metros. El local debe tener una entrada independiente. Además, deberá obtener el consentimiento del propietario para abrir una clínica veterinaria.
Paso 2
En cuanto a la superficie del local, 60 metros cuadrados son suficientes para un pequeño hospital. Puede acomodar fácilmente un mostrador de recepción, una sala de recepción, un quirófano, una sala de tratamiento, un baño y una sala de diagnóstico. Las paredes de la habitación donde se recibirán y tratarán los animales deben ser de materiales lavables, como azulejos.
Paso 3
Compra el equipo y el mobiliario necesarios. En el pasillo, colocar un par de sillas para visitas, una mesa y silla para el administrador, se requerirán sillas y mesas en la sala de personal, sala de tratamiento. No olvide los botiquines, el frigorífico y la ducha para el personal. El quirófano debe estar equipado con una mesa para intervenciones quirúrgicas, una lámpara, un instrumental, un esterilizador.
Paso 4
Además, compre equipos de ultrasonido o de laboratorio. Aunque es la parte más cara, es indispensable. De lo contrario, será imposible realizar diagnósticos.
Paso 5
Contratar personal. Es mejor comenzar a buscar candidatos adecuados con anticipación, ya que necesitará un especialista experimentado y un aspirante a veterinario. Por lo general, un médico experimentado realiza una cita inicial, prescribe un curso de tratamiento, realiza operaciones y un principiante ve a los pacientes nuevamente y realiza los procedimientos. Es mejor tener un horario de trabajo flexible, ya que la mayoría de las personas traen a sus mascotas a la clínica los fines de semana. Esto significa que al menos un médico debe estar siempre en el lugar de trabajo. Además de los médicos, contrate a un contador, un limpiador y un administrador a tiempo parcial para la clínica.