La competencia en la economía es un proceso en el que, como resultado de la interacción y lucha entre empresas, se logran las mejores condiciones para la venta de productos de cada empresa en particular. La competencia económica es un ímpetu para el desarrollo de una empresa individual y de toda la economía.
Papel económico
Durante las últimas dos décadas, la competencia se ha disparado y continúa creciendo a nivel mundial. Pero incluso a principios de siglo, la rivalidad entre organizaciones no era tan feroz. Esto se debió a que los gobiernos y los grandes carteles frenaron la competencia. Hoy en día, prácticamente no hay industrias que no se vean afectadas por su influencia. La competencia puede producir resultados diametralmente opuestos. Para los ganadores: un aumento de su propia riqueza, fama y vida asegurada, a veces varias generaciones por delante. Para los perdedores: ruina, pobreza, inflación, inestabilidad, desempleo, etc.
Adam Smith caracterizó el comportamiento competitivo como una competencia leal, cuyo principal instrumento era la presión sobre los precios. En el siglo XXI, esta definición ha cambiado. A menudo, no existe la posibilidad de influir en el precio. La competencia moderna significa la lucha entre lo viejo y lo nuevo. Es un llamamiento a las nuevas tecnologías, nuevos tipos de organización, nuevos productos e ideas. Gracias a la nueva interpretación, la competencia ha tenido un impacto significativo en la economía en su conjunto.
Tipos de competencia
Según los métodos de confrontación, existe una distinción entre competencia de precios y competencia sin precios. En el primer caso, la victoria económica se logra mediante la venta de bienes y servicios a precios más bajos que los de las empresas competidoras. La reducción de precios se puede lograr reduciendo los costos de producción o reduciendo los ingresos. Las pequeñas empresas pueden reducir los precios durante un período de tiempo relativamente corto, mientras que las grandes empresas tienen los recursos para renunciar por completo a las ganancias si esto ayuda a sacar a los competidores del mercado. La victoria les permitirá aumentar significativamente el precio en el futuro, lo que compensará todas las pérdidas.
La competencia no relacionada con los precios no afecta los cambios de precios. En este caso, entran en juego métodos como la publicidad, el uso de tecnologías especiales y la prestación de servicios posventa. Resulta que sale a la venta un producto de mayor calidad que el de la competencia. Por lo general, la atención se centra en el respeto al medio ambiente del producto, la estética y la seguridad en el uso. En la lucha por un lugar en el sol económico, algunas empresas recurren a la competencia desleal. Sus métodos son publicidad engañosa, espionaje industrial, venta de bienes a precio inferior al costo, acuerdos separados con algunos competidores.