El verano es el mejor momento para ahorrar en comida. Lo más importante es saber cómo se puede hacer.
Instrucciones
Paso 1
No compre helado con aderezos en el verano, porque hacen que la golosina fría sea mucho más cara. Es más barato y más útil comprar un helado común, hacer puré de papas con bayas y azúcar, cortar sus frutas favoritas en trozos y mezclar.
Paso 2
Por el bien de la economía y los beneficios para la salud, en lugar de comprar limonadas, prepare las suyas propias. Por ejemplo, vierta agua hirviendo sobre dos vasos de bayas y cubra con una tapa. No es necesario cocinar. Después de una hora, agregue azúcar o miel al gusto, embotelle y guarde en el refrigerador.
Paso 3
Las verduras del jardín deben lavarse, colocarse en un frasco de agua fría y guardarse en el refrigerador. Por lo tanto, estará fresco durante mucho tiempo. Si las verduras todavía están marchitas, séquelas extendiéndolas sobre la mesa. Luego muela y utilícelo para sopas y platos principales.
Paso 4
Mantenga el pan en el refrigerador para mantenerlo mohoso. Y seque el pan sobrante en el horno y haga kvas casero con él; resultará más barato que el comprado. Además, el kvas casero es muy útil, ya que no contiene conservantes y tiene un alto contenido en vitamina B.
Paso 5
En verano, durante la temporada de verduras, no compre arroz y otros cereales, fideos. Prepare guarniciones con lo que haya madurado en los parterres del jardín. Por ejemplo, corte los pimientos en tiritas, agregue los tomates y saltee todo con trozos pequeños de pollo. Haz mezclas de verduras a tu gusto (tomates, guisantes y calabacín o berenjena, pimientos). Por cierto, tales mezclas se pueden clasificar en paquetes y congelar para el invierno.
Paso 6
Si no hay tiempo para hacer mermelada, haz "cinco minutos". Lave las bayas, cubra con azúcar, cocine por cinco minutos. Déjalo toda la noche. Por la mañana, mientras va a trabajar, cocine durante cinco minutos y déjelo en el fuego. Por la noche, cocine por otros cinco minutos y coloque en los frascos.
Paso 7
Las remolachas y las zanahorias se pueden preparar para uso futuro a fin de no comprarlas en invierno cuando estas verduras son más caras. Cortar las remolachas peladas en cubos o cubos y rallar o cortar en dados las zanahorias. Dividir en bolsas, atar y guardar en el congelador.