En la mayoría de los casos, una persona solicita una pensión después de alcanzar la edad legal o la antigüedad en el servicio. Sin embargo, en algunas situaciones, puede ser necesario que un jubilado rechace los pagos que se le adeudan.
Instrucciones
Paso 1
Cuando cumpla la edad legal de jubilación, no solicite al Fondo de Pensiones que le asigne una pensión. En este caso, podrá incorporarse al programa de cofinanciación de pensiones en condiciones especialmente favorables. Esto es conveniente para las personas trabajadoras que pueden renunciar a su pensión durante varios años para recibirla posteriormente en una cantidad mayor. Para ello, debe presentar una solicitud al Fondo de Pensiones para participar en el programa de cofinanciamiento. Se le dará un número de cuenta al que deberá transferir una cantidad anualmente. El estado cuadriplicará las contribuciones hasta doce mil rublos. Puede participar en el programa durante diez años, y luego podrá solicitar un aumento de pensión.
Paso 2
Renuncia a la pensión que ya te pagan. Para ello, diríjase a la sucursal del Fondo de Pensiones de su lugar de residencia y redacte la solicitud correspondiente. Sin embargo, cabe señalar que de esta forma no recibirás ningún beneficio económico. Si no necesita este dinero ahora, es más fácil dejarlo en su cuenta de jubilación y luego usarlo como mejor le parezca.
Paso 3
Elija una opción alternativa para recibir la parte financiada de su pensión. Con su ayuda, no renuncia a los pagos por completo, sino que los redistribuye: se le pagan todos los ahorros durante los primeros diez años de su jubilación. Este esquema está permitido para los ciudadanos nacidos antes de 1966, ya que su parte financiada de la pensión es pequeña; el empleador hizo contribuciones al mismo solo durante dos años, es decir, entre 2002 y 2004. Para hacer esto, una persona debe presentar una solicitud al Fondo de Pensiones con un pasaporte y un certificado de seguro de pensión. La forma más sencilla de hacerlo es en el momento del alta de la pensión, es decir, al cumplir los 60 años para los hombres y 55 para las mujeres.