La crisis financiera es una situación muy mala para la mayoría de la gente. Al mismo tiempo, es un período muy bueno para aquellos pocos que lograron prepararse, adaptarse rápidamente y reorientarse, lo más importante, que tienen cierto margen de seguridad. Los saltos de los precios de las acciones y los tipos de cambio no brindan una oportunidad para relajarse, colocar capital rentable o esperar su crecimiento.
Instrucciones
Paso 1
No se preocupe, no pierda la cabeza y no haga movimientos bruscos. En este momento, todo debe hacerse con prudencia y prudencia. No entre en pánico y no se apresure a cambiar su moneda.
Paso 2
Es mejor mantener la mayoría de sus ahorros (alrededor del 50%) en moneda nacional, por supuesto, si su negocio no necesita una afluencia constante de dinero extranjero. A su vez, divide la parte restante de tus ahorros a partes iguales entre euros y dólares (25% cada uno).
Paso 3
Las inversiones durante una crisis o inmediatamente después de ella son las más rentables si sabe en qué invertir. Sin embargo, esto solo se aplica a inversiones a largo plazo que duren al menos 3-5 años. Si no teme la posibilidad de quedarse sin ganancias durante el primer año o dos (tal vez incluso entrando en números rojos) y hay una tendencia hacia un riesgo razonable, entonces una contribución a las industrias que sufren pérdidas será relevante en aproximadamente seis meses o un año. Lo principal aquí es no confundirse con una empresa que atraviesa una crisis con las menores pérdidas.
Paso 4
La crisis financiera (especialmente en su etapa inicial, cuando las tasas de interés de los préstamos aún no han aumentado) es el mejor momento para solicitar un préstamo. La moneda del préstamo debería caer en relación con el resto. Solo en este caso, el préstamo no se convertirá en un pago en exceso por una compra impaciente, sino en una inversión rentable de dinero. Simplemente no se olvide de la vieja regla: el dinero que pidió prestado debe ganarlo con sus propios intereses.
Paso 5
Si un préstamo ha estado pendiente de su cabeza durante mucho tiempo y la moneda en la que se tomó continúa aumentando y fortaleciéndose (por ejemplo, el euro), cámbielo por el dólar. Lo principal es calcular correctamente todos los intereses, así como las comisiones y costes asociados a la refinanciación, para no acabar en peor situación como consecuencia.
Paso 6
Puedes jugar en la bolsa de valores, pero recuerda que puedes perder. En este caso, definitivamente no podrá devolver el dinero perdido.