Los activos financieros son una forma específica de propiedad que permite a una empresa generar ingresos adicionales. Otorgan al propietario el derecho a exigir el pago al acreedor de conformidad con el contrato.
Instrucciones
Paso 1
Los activos financieros incluyen oro, valores, efectivo y depósitos, reservas técnicas de seguros, préstamos, cuentas por cobrar y por pagar e inversión extranjera directa. También les pertenecen los instrumentos de patrimonio de otras sociedades. En cualquier caso, la característica distintiva de los activos financieros es que pueden intercambiarse fácilmente por dinero (es decir, tienen una alta liquidez) o por otros instrumentos financieros.
Paso 2
A su vez, los activos financieros no incluyen deuda sobre anticipos, derechos contractuales sobre futuros, activos no contractuales, activos tangibles e intangibles. La posesión de estos activos, si bien es rentable, no da derecho a recibir otros activos financieros. Además, los pasivos fiscales no se incluyen en el número de activos. No puede considerarse como un instrumento financiero, ya que no tiene carácter contractual.
Paso 3
El concepto opuesto de activos financieros es pasivo financiero. Surgen cuando el acreedor recibe dinero del deudor según los términos del contrato. Este procedimiento es un activo financiero para el acreedor y un pasivo para el deudor.
Paso 4
La división de las transacciones financieras en activos y pasivos no se realiza según su tema, sino según la dirección de la transacción. Los mismos instrumentos, por ejemplo, los valores para algunas empresas pueden ser un activo y para otras, un pasivo. Así, cuando una empresa emite sus propias acciones y las vende en el mercado abierto, estas actúan como un medio para obtener capital de deuda o como un pasivo financiero. Para aquellas empresas que compran estas acciones en bolsa, se convierten en activos.
Paso 5
Los activos financieros se diferencian de los activos productivos en que no tienen propiedades de consumo. Su único propósito es generar beneficios para la empresa a partir de su adquisición. Evidentemente, la empresa no invertirá sus fondos en aquellos activos financieros que no podrán generar ingresos adicionales.
Paso 6
El uso racional de los activos financieros asegura el ritmo del ciclo operativo, así como la estabilidad del flujo de capital de trabajo. En consecuencia, la eficiencia de la empresa está determinada en gran medida por la gestión competente de los activos financieros. Los principales objetivos de la gestión deben ser asegurar el equilibrio de los flujos financieros, su sincronización de formación en el tiempo, así como asegurar el crecimiento del flujo de caja neto de la empresa.