Una cuenta contable significa una posición contable reflejada en la contabilidad. Esta cuenta está destinada a la contabilidad permanente del movimiento de cada grupo específico de fondos en términos monetarios.
Instrucciones
Paso 1
Utilice un programa de contabilidad especial para abrir o mantener una cuenta. Debe estar previsto en todas las organizaciones.
Paso 2
Determina qué cuenta vas a compilar. Todas las cuentas contables se dividen en: pasiva, activa y activa-pasiva.
Paso 3
Haz una tabla y divídela en dos lados: débito y crédito. Reflejar en la cuenta contable todas las transacciones comerciales que se realizaron para cada día de la empresa. Después de todo, es la cuenta contable la que será un documento para almacenar información que, como resultado, deberá adjuntarse a otros documentos contables. Para ello, cree cuentas independientes para cada objeto empresarial específico.
Paso 4
Registre y agrupe los activos de la empresa en la cuenta. A su vez, clasificarlo: según las fuentes de educación, según ubicación y composición, según características cualitativas y homogéneas, expresadas en medidas naturales, monetarias o laborales.
Paso 5
Recuerde que las transacciones que ha realizado la empresa se registran en las cuentas a medida que se acumulan. A su vez, puede registrar cada uno de ellos por separado, pero si hubo varias operaciones homogéneas, puede reducirlas a declaraciones acumulativas o grupales (según los documentos primarios). De esta forma, puede reducir el número de entradas en cuentas existentes.
Paso 6
Abra una cuenta separada para cada tipo de propiedad, transacción y responsabilidad. Luego asigne nombres, números digitales a las cuentas y adjunte estos datos a cada elemento del balance.
Paso 7
Haz una doble entrada. Después de todo, cada operación debe reflejarse dos veces: en el débito de una cuenta y, al mismo tiempo, en el crédito de otra - cuenta interconectada en la misma cantidad. Dicha entrada se puede indicar de diferentes maneras y también depende de la forma de contabilidad.