Para obtener una evaluación objetiva de la estabilidad financiera, solvencia, actividad comercial de una empresa y la efectividad de sus actividades, es necesario analizar su situación financiera. Se lleva a cabo al considerar el tema de los préstamos a una organización, discutir las perspectivas de inversión, introducir procedimientos de quiebra contra la empresa.
El análisis financiero se lleva a cabo sobre la base de los estados financieros: balance general (formulario No. 1), estado de pérdidas y ganancias (formulario No. 2), estado de flujo de efectivo (formulario No. 4), anexo al balance general (formulario No.. 5), nota explicativa y otros documentos. Su metodología se basa en el cálculo de coeficientes que caracterizan las actividades financieras y económicas de la empresa: ingresos promedio mensuales, indicadores de solvencia y estabilidad financiera, eficiencia de uso del capital de trabajo, ganancia y rentabilidad, actividad inversora.
En primer lugar, se determina el indicador básico: el ingreso mensual promedio, que indica el nivel de ingresos para el período del informe y determina la cantidad total de recursos financieros de la organización. La mayoría de los coeficientes restantes se calculan en función de su valor. Una característica adicional de la liquidez de las finanzas de la empresa es la participación del efectivo en los ingresos.
Luego se establece el grado de solvencia, es decir, la relación entre el monto de los pasivos a largo y corto plazo y los ingresos mensuales promedio, lo que determina la situación general de la deuda de la empresa con los acreedores. La estructura de la deuda está formada por la distribución del coeficiente monetario en varios componentes: deuda sobre préstamos bancarios y préstamos a organizaciones e individuos, impuestos y pagos a fondos extrapresupuestarios, otros acreedores dividiendo el valor correspondiente en el balance por los ingresos mensuales promedio.
Una relación importante de estabilidad financiera es el indicador de solvencia de la deuda actual, que se calcula como la relación entre los pasivos a corto plazo y los ingresos mensuales promedio. Determina el momento del posible reembolso de la deuda actual a los acreedores.
Estrechamente relacionado con este último indicador se encuentra el índice de cobertura de los pasivos a corto plazo con activos circulantes (liquidez corriente), que se calcula como la relación entre el valor de los activos corrientes (acciones, cuentas por cobrar, efectivo, inversiones financieras a corto plazo) y pasivo. Caracteriza el grado de seguridad de la deuda para los acreedores con activos de rápida realización. Además, durante el análisis de las actividades financieras y económicas, se calcula el índice de liquidez absoluta: el índice entre el monto de las inversiones financieras a corto plazo y el efectivo y los pasivos a corto plazo.
La estabilidad financiera de la organización se confirma por la presencia en la rotación del capital social, es decir, la diferencia entre el capital social y los activos no corrientes, la participación del capital social en el capital de trabajo (la relación entre el capital social en circulación y la cantidad de trabajo capital), así como el coeficiente de autonomía: la relación entre el capital social y el monto de los activos no corrientes y corrientes.
Se concede gran importancia al suministro de activos circulantes a la organización. Al analizar la situación financiera, se define como la relación entre el activo circulante y las ganancias medias mensuales, que caracteriza la tasa de circulación de los fondos invertidos en el activo circulante. Además, se calcula el coeficiente de capital de trabajo en producción y cálculos.
Uno de los criterios para el funcionamiento eficaz de una empresa es la rentabilidad. En el análisis de la sostenibilidad, se determina el rendimiento del capital (cociente de dividir las ganancias antes de impuestos por la cantidad de activos corrientes) y el rendimiento de las ventas (la relación entre las ganancias y los ingresos, que muestra cuántos rublos de ganancias se obtuvieron como resultado de la venta de bienes y servicios por 1 rublo de ingresos).
Además, los inversores potenciales pueden estar interesados en el indicador de actividad inversora, que se calcula dividiendo el monto de las inversiones en activos no corrientes y las inversiones financieras a largo plazo por el valor total de los activos no corrientes. Caracteriza las estrategias de desarrollo de la organización, modificación y mejora de la propiedad.