Es imposible aprender a operar en el mercado de divisas o en el mercado de valores en unos pocos días y convertirse en un comerciante profesional. Como cualquier profesión, el comercio requiere conocimientos y experiencia. No es tan fácil aprender la profesión de comerciante, esto se debe a la presencia en Internet de una gran cantidad de información innecesaria y, a veces, francamente falsa. Para convertirse en un comerciante profesional, debe ceñirse a un plan determinado.
Lo primero que debe aprender un trader novato son los conceptos básicos de los mercados financieros. No puede iniciar un comercio sin saber cómo hacerlo. Descubra qué son las acciones y los pares de divisas, posiciones de apertura y cierre, tendencias alcistas y bajistas, lotes y ticks, etc. Solo habiendo recibido una comprensión general de los mercados financieros se puede comenzar a estudiarlo más profundamente. Toda esta información se puede obtener de diversas fuentes, pueden ser libros (tanto electrónicos como impresos) o cursos especiales (seminarios, videocursos, etc.). Además de aprender los conceptos básicos, puede comenzar a operar en cuentas comerciales de demostración. Muchos traders novatos cometen un gran error. Habiendo recibido conocimientos básicos en comercio, intentan aprender tantos tipos de mercados como sea posible, por ejemplo, estudian en profundidad el comercio de acciones, futuros y opciones. Tal variedad de intereses no conducirá a nada bueno, para convertirse en un buen comerciante, debe especializarse en áreas específicas. Una vez que haya recibido una comprensión básica de los mercados y haya estudiado la dirección específica del comercio, debe decidir exactamente cómo comerciará, qué técnica comercial o sistema comercial utilizará. Para resolver este problema, puede utilizar los servicios de profesores profesionales que imparten seminarios pagados y enseñan sus estrategias comerciales o estudian sistemas comerciales específicos por su cuenta. La primera forma de enseñar, con la correcta selección de profesores, es más correcta, porque permite obtener información sobre productos terminados. El autoaprendizaje es un proceso largo y no siempre efectivo; con este enfoque, la efectividad de un sistema comercial en particular siempre se probará en nuestra propia experiencia.