Un análisis de la actividad comercial de una empresa debe caracterizar los resultados y la efectividad de sus principales actividades de producción. Además, se puede obtener una evaluación confiable de la actividad empresarial como resultado de la comparación con empresas relacionadas con el ámbito de la inversión de capital. Sin embargo, tal análisis requiere que se identifiquen varios criterios.
La esencia del análisis empresarial
La actividad comercial de cualquier empresa se refleja en su reputación, el ritmo de desarrollo económico y las perspectivas de venta de productos o servicios. El análisis de la actividad empresarial, a su vez, permite comprender con qué eficacia funciona la gestión de la organización y cómo se utilizan los recursos propios y captados en las actividades empresariales.
Desde el punto de vista del análisis financiero, la actividad empresarial se caracteriza por indicadores de facturación. En consecuencia, la evaluación de la actividad empresarial implica la necesidad de determinar los ratios de rotación de los siguientes componentes:
- Activos fijos;
- capital de trabajo;
- activos;
- cuentas por pagar;
- cuentas por cobrar;
- inventarios.
Los índices de rotación para cada uno de estos parámetros están determinados por el índice de ingresos por ventas al valor promedio anual de los activos fijos, capital de trabajo, fondos, capital, el monto de los préstamos, cuentas por cobrar e inventarios de la compañía, respectivamente.
Son estos índices los que reflejan más plenamente el nivel de rentabilidad de la empresa y afectan la estabilidad de su posición financiera en el mercado.
Indicadores más significativos de la actividad empresarial
Para realizar un análisis de la actividad empresarial, se tienen en cuenta todos los indicadores anteriores. Sin embargo, las principales son las cuentas por cobrar y por pagar. Después de todo, el aumento en las cuentas por cobrar y por pagar suele estar interconectado, generalmente conduce a dificultades en el pago de facturas, contribuciones a los fondos de la organización y, a menudo, es una de las principales razones para la terminación de la empresa. Por otro lado, las empresas que tienen la capacidad de cobrar las cuentas por cobrar más rápido de lo debido, teóricamente pueden operar sin pedir fondos prestados. Sin embargo, en la práctica, casi todas las grandes empresas obtienen préstamos de una forma u otra para el desarrollo de la producción y la refinanciación de deudas.
El análisis del desempeño comercial es importante para comprender la eficiencia de los procesos comerciales de una empresa y la eliminación oportuna de todo tipo de "fugas financieras". Por otro lado, conociendo los indicadores de facturación existentes, la dirección de la empresa tiene la oportunidad de obtener una justificación económica de la viabilidad de captar diversas fuentes de financiación.